Reflexiones a los 35

¿Los años pasan sobre uno? ¿Pasa uno por los años? Sea ninguna o sea los dos, el hecho es que ayer cumplí 35 años.
A continuación, mi lista de reflexiones de vivir contando mis días.
1. Quería formalizar muchas cosas de mi ministerio, pero no podía hacerlo; me exigían documento de identidad y apenas tenía 16.

2. Era veinteañero y ya era pastor, y me sentía una especie de mascota para la fraternidad de pastores de mi distrito.

3. Desde los 25 hasta los 30, el que menos sabía cómo atormentare. Sólo tenían que preguntarme «cuándo te casas» y listo.

4. Mi máximo fulgor ministerial lo viví entre los 25 y 28: radio, prensa, televisión, conferencias, viajes a todas partes, etc.

5. Cumplí los 30 años con expectación elevado al cubo (a esa edad los judíos recibían su herencia, y yo quería la mía).

6. No podía pasar los 35 soltero, y de cierto de cierto que no lo pasé. Me casé a los [proféticos] 33 años.

7. Aún no cumplo 40 y ya viví grandes cosas. ¿Cómo será cuando empiece a vivir de verdad (que es a los 40)?

¡No se pierdan el próximo capítulo…!

Deja un comentario