Al fin pude ver la película Lightyear con mis hijos . A pesar de la advertencia, retirada luego, del mismo Cineplanet. A pesar de su censura en varios países en otras parte del mundo. A pesar de la anti campaña de mis hermanos celosos por la sana doctrina.

Primero, porque siempre me gustó Toy Story, y siempre es grato conocer la historia de uno de los personajes.

Segundo, porque a mis hijos les enseño siempre a cuestionar todo. Todo incluye libros, películas, canciones, sean cristianas o no cristianas. Todo, excepto la Biblia.

Vivimos en el mundo, por tanto expuestos diariamente a miles de mensajes anti Dios. La única manera de cuidar el corazón es con una cabeza crítica, y lentes bíblicos para discriminar entre lo malo, lo bueno y lo feo.